Thursday, February 27, 2014



Momotombito
D. Arroliga.

Momotombito es una isla volcánica en en lago de Managua o Xolotlán. Nuestros ancestros chorotegas le llamaban Cocobolo, por los árboles de Ñambar que abundaban ahí. Fue un santuario indígena. Momotombito es la isla... más grande del lago y su estratovolcán tiene una altura de casi 400 metros. Hasta donde se sabe, está dehabitada excepto por una familia que vive allí, pero está infestada por serpientes de cascabel.

Mi papá iba a cazar allí en los años 50, ya que tambíen habían tigrillos y toda suerta de aves acuáticas. Efraín Squire, arqueólogo y diplomático norteamericano, encontró en la isla ídolos y piezas precolombinas en 1849. A partir de entonces ha habido un saqueo terrible de piezas arqueológicas y nunca a nadie se le ocurrió proteger a Momotombito de esta lacra.

A Momotombito se llega por vía acuática desde Piedras Azules, Nagarote, o desde Puerto Momotombo donde se encuentra León Viejo.
 

Wednesday, February 26, 2014

 
 
La Iglesia de Xalteva, Granada
D. Arroliga
 
'Me gusta la prestancia de la Ña Genoveva, parece en elegancia la torre de Xalteva. Pero hay un detallito, de viaje que la friega, ese lunar de pelo en el tronco-e-la oreja' Antojitos Nicaraguanses de Carlos Mejia G.

Iglesia d...e Xalteva. Construida en 1678 en las afueras de Granada en el barrio indígena de Xalteva. Utilizada como refugio durante ataques piratas y de cuartel de las tropas liberales jefeadas por el general Máximo Jerez al comienzo de la Guerra Civil nicaraguense en 1854 que devino después en la Guerra Nacional. El sitio de Jerez duró casi 9 meses y los leoneses no se pudieron tomar Granada. Después los leoneses invitaron a Walker y ahí fue cuando empezó el gran bochinche de la Guerra Nacional.
 

 
 
Mokorón y el Mokoronazo
D. Arroliga.

A instancias de una pregunta de una de mis alumnas NEXBA, recordaremos un evento histórico tragi-cómico. Mokorón puede referirse a dos cosas: cerro cerca de Managua localizado al sur oeste de la UNAN o a un pueblito chinandegano fronterizo con Honduras.

En febrero de 1957, el Ing. Luis Somoza Debayle, tomó posesión del periodo presidencial que hubiera ocupado su finado padre, Anastasio Somoza Garcia, ultimado a balazos en septiembre del año anterior por el poeta Rigoberto Lopez Perez. En medio de la gran cacería de brujas que se sucitó después del atentado, había en Nicaragua un ambiente de esfervecencia política y descontento por los ribetes que alcanzó la tremenda represión oficialista que encarceló en una noche a más de 6000 personas.

Para aplacar la situación y desviar la atención de la opinion pública hacia otros ámbitos, Luis Somoza declaró en su discurso inaugural, que tropas hondureñas habían invadido Nicaragua y se habían tomado el pueblito de Mokorón matando a 57 guardias nacionales. El pueblo se enardeció de patriotismo y se aprestó para la guerra de defensa a la soberanía pisoteada por los hondureños. Al final, todo resultó ser una patraña y mentira de los Somoza en su afán por desviar la atención del pueblo a un conflicto ficticio con Honduras. Nunca hubo tal invasión ni guardias muertos, pero el gobierno aprovechó para comprar 77 tanquetas de rueda Staghound a Israel.



Palomita Guasiruca
D. Arroliga.

Como muchas canciones autóctonas de Nicaragua, Palomita Guasiruca es una canción de amor que tiene doble sentido. El enamorado que llega a urgir a la novia para que se vaya de 'juida' con él antes que despun...te el alba. Y luego harán el amor llevando ella los remos (sus piernas) y él 'el amor', su miembro viril. Se oyen las frases de amor del enamoramiento 'ay currucuchita, linda palomita, venite mamita que te voy a acurrucar'. La canción es anónima y fue rescatada por el compositor nicaraguense Erwin Kruger y finalmente popularizada por Carlos Mejía y su grupo.
https://www.youtube.com/watch?v=PWs8mQK6WSA

 

Friday, February 14, 2014

 
¿Dos Guardabarrancos? D. Arroliga.
Resulta que el guardabarranco (Eumomota superciliosa) a la izquierda en la primera foto, nuestra ave nacional, tiene un pariente muy parecido, pero un poco diferente, el Momotus momota, mejor conocido como talapo. Este último es más grande que nuestro pájaro nacional y su cucurucho es todo Azul. Sus ojos también son rojos, mientras que nuestro pájaro tiene los ojos negritos. El guardabarranco tiene un antifás celeste claro sobre sus ojos. En el Salvador, también es el ave nacional y se le conoce como torogoz, por el sonido de su cantido. A nosotros nos visitan guardabarrancos en nuestro jardín, pero nunca los he oído cantar. Son muy ariscos y anidan en las laderas de cauces y ríos. De ahí el nombre.

Así que de nuevo se los presento, para evitar confusiones y no se vaya a enojar el guardabarranco al confundirlo con el talapo.



 

Wednesday, February 12, 2014

 
 
 
El Zenzontle D. Arroliga.
"Compadre Guardabarranco, hermano del viento, del canto y de luz: decime si en tus andanzas vista a una chavala llamada Arlen Siu" Así comienza la canción de Carlos Mejia 'El zenzontle pregunta por Arlen'.

El zenzontle es un pajarito gris oriundo de América que imita el canto de otros pájaros, sonidos de animales y hasta ruidos de máquinas. En otros lugares se llama sinsonte o cenzontle o ruiseñor. En inglés es el mockingbird. En nuestro jardin anidan en nuestro árboles de limón y níspero, y defienden sus nidos agresivamente cuando llegan los zanates a fregar. A veces se unen varios para defender sus nidos contra los necios zanates o de los guises.

La palabra zenzontle viene del náhuatl Centzontototl, de Centzontli ("Cuatrocientos") y Tototl ("Pajaro, ave"), pájaro de las cuatrocientas voces. Esto se debe al canto del ave en cuestión. De hecho los machos experimentados tienen repertorios de 50 a 200 canciones, razón por la cual, su nombre científico es Mimus polyglottos, porque polyglottos, en griego significa "muchas lenguas".

El tlatoani de Texcoco, Nezahualcóyotl hizo el siguiente poema en náhuatl, donde habla sobre la belleza del cenzontle:

Nehuatl nictlazotla in centzontototl icuicauh; nehuatl nictlazotla in chalchihuitl Itlapalizihuan in ahuiacmeh xochimeh; zan oc cenca noicniuhtzin in tlacatl, Nehuatl nictlazotla.

'Amo el canto del cenzontle, pájaro de cuatrocientas voces; amo el color del jade y el enervante perfume de las flores; pero amo más a mi hermano el hombre.'

Saturday, February 8, 2014




El Año del Humo: Erupción Krakatóica del Cosiguina D. Arroliga.
Un viernes 20 de enero de 1835 a las 6 de la mañana, el Volcán Cosigüina comenzó a echar un hilo de humo que se perdió entre las nubes que mantenían cobijado el cono del volc...án por su enorme altura, que se calculaba en unos dos mil metros sobre el nivel del mar. Una hora después se sintieron los primeros retumbos, seguidos de temblores.

Los animales comenzaron la huida ahí iban las bandadas de aves, las manadas de venados, jabalíes y coyotes, los jaguares, pumas y dantos y toda clase de animales que se mezclaba con el ganado de la zona, que huía sin rumbo.

A las 11 de la mañana su explosión estremeció a toda Centroamérica, el cielo de Chinandega, El Salvador y Honduras se oscureció completamente.

Tres días duró la erupción: el primer día por la presión de los gases voló el taponazo, lanzando grandes piedras hacia el Océano Pacífico, donde quedaron promontorios de rocas, llamados islas Farallones que cerraron un poco la boca del Golfo de Fonseca.

El segundo día siguió arrojando humo, piedras y cenizas, que llegaron hasta Ecuador.

El tercer día los bordes de aquella inmensa boca se desplomaron con grandes estruendos, unos cayeron afuera y otros dentro del cráter.

Las piedras pómez que arrojó en esos días flotaron hasta Colombia. En esos días Oaxaca en México y algunas islas del Caribe se cubrieron de sombras por las cenizas lanzadas por el volcán, de ahí que se le llamó el año del polvo.

Relatos de aquella época, recogidos en “Historia de la Federación de la América Central”, cuentan que: ”llegó a causar las tinieblas más completas, de modo que fue indispensable encender velas y hachones para ver a medio día, pues sin luz artificial era imposible verse la palma de la mano, y las personas se tropezaban unas con otras al circular por las calles”.

“Los fieros tigres llenos de mansedumbre, y los huraños venados, perdida la timidez, se llegaban a las poblaciones en busca de la luz de los hachones…”

“En Nacaome, lugar de Honduras situado al norte del Cosigüina, los habitantes vieron en la oscuridad del cielo ”vislumbres colorantes”, con lo que creyeron atemorizados que podía incendiarse la atmósfera”.

Después de la erupción, muchas personas perecieron de dolores de garganta, tos, catarros y disentería; la península quedó destruida, el ganado cimarrón y de crianza quedó sepultado bajo toneladas de arena y ceniza.

Hoy el Cosiguina tiene 852 metros de altura y una laguna en su cráter.

(Tomado de la Revista Enlace)

 
 
El Almendro de onde la Tere. D. Arroliga.
Allá por el año 1975, tenía yo 18 años, me tocó ir de intérprete de un pastor gringo que visitó Somoto. Nos hospedamos en un pequeño hostal en Calle Real de Somoto, a una cuadra de la plaza. Frente... al hospedaje había una pulpería que se llamaba ´Pulpería Tere'. Me crucé la calle una tarde calurienta para comprarme una cocacola y me atendió una señora morenita menuda muy amable. Noté entonces que en la pared había un póster de Carlos Mejia Godoy, quien lo firmaba diciendo 'a mi tía Tere Armijo'. Atando cabos le pregunté sorprendido a la señora: '¿Usted es Doña Tere Armijo la del almendro?', y ella con una risita me respondió: 'Sí mijito. Allá sigue el almendro en el fondo del patio'. Alzando la vista hasta el fondo de la casona, miré el árbol de almendras de la famosa canción de Carlos.
 
Este fue uno de los momentos más bonitos de mi vida y la canción de Carlos una de las más bellas mazurquitas de mi tierra. http://www.youtube.com/watch?v=IP5lTKmqPtw

 
 
Aquel fatídico 22 de enero de 1967
D. Arroliga.

Era domingo. Despues de la iglesia nos fuimos a almorzar donde mi abuela alla por el Cine Salinas. Como a las 5pm, mi mama tomo un taxi con nosotros (mis tres hermanos y yo) y le dio la direccion de la casa: de la gasolinera San Antonio, 2 cuadras y media abajo. Mi mama no sabia lo de la manifestacion, pero el estupido taxista si. Y en lugar de tomar una ruta que evitara pasar por el centro de Managua, se metio de lleno por la calle Momotombo contra la via por el caos y el alboroto, pasando frente al Gran Hotel en medio de la balacera y las bombas lacrimogenas. Me imagino que le paso por curioso. Al pasar por el Teatro Gonzalez, una pareja joven que estaba en cine se nos metio en el taxi a la fuerza huyendo del alboroto. Al fin llegamos a la casa casi asfixiados y todos llorosos por los gases lacrimogenos, la angustia de mi mama, y atemorizados por el trepidar de bombas, los canonazos de la tanqueta del general Allegret y las detonaciones de los Garands .

Al dia siguiente era lunes, y mi papa como siempre me llevo de la mano al Colegio Bautista como a las 7am. Yo tenia 10 anos y estaba en 5to grado. Al pasar por el Banco Central, frente al Banco Nacional (ahora la Asamblea Nacional), miramos a unos empleados que en la acera del Banco Nacional estaban lavando la acera con mangueras y todo estaba lleno de sangre. En la acera del Banco Central estaban decenas de guardias parapetados con sus Garands y con caras de pocos amigos. Mi papa, que era opositor, me dijo: "Papito, pasemos rapido, no los volvas a ver ni preguntes nada"

Esta foto fue tomada sobre la Avenida Roosevelt viendo hacia al lago frente al Banco Central.


 
 
THE HACIENDA

by D. Arróliga

 

Colonel Cole was fuming:  “What do you mean the bastards ran you away?  We are Americans!!!  We are better armed and better trained,” he screamed.  “They’re just a bunch of savage greasers that don’t know the first thing about fighting.”  Embarrassed, McDonald said: “They surprised us Byron.  We didn’t realize the place was so well-defended.  There must be some 500 men at that place.  I lost Jarvis.”  “C’mon Mac.  You got scared.  A bunch of indians got you scared.”  Cole said.  “This is bad. We can’t have those sons of bitches too close to home.  How far is that frigging ranch?” he asked.  “About 10 miles north, just off the road to Chontales,” responded McDonald.  “Send a runner to Bill in Granada and await for his orders, on the double,” Cole ordered.

 

A few days later, on the morning of September 14, 1856, the wheels of history would turn with the events about to unfold in the next couple of hours.  It was a foggy morning.  Kind of chili for this time of the year, and Faustino Salmerón, curled up on a high branch of an ancient Guanacaste, heard more than saw the approach of the enemy’s horses.  They were many, perhaps more than 100.  They came in slowly, but making too much noise for a veteran scout like Faustino to pass up.  He soundlessly slipped from the tree, hopped on his horse and headed to the house to report to his commanding officer.

 

Colonel Estrada was a quiet and solemn man.  He took the news in stride, and showed no emotions in front of his troops.  He went inside, and called his officers.  He told them about the situation: A column of between 200 and 300 mercenaries was headed to the Hacienda.  Their purpose: to run over the post to have a safe passage for the supplies coming from the north and center of the country, particularly beef from Chontales.  The patriots were to make a stand and deny the invaders another inch of land.  They would not retreat.  Not today.

 

Estrada ordered three points of defense around the house: the stone fence on the west, the southern corridor of the house itself, and the corral located just east of the house across diagonally from the southern corridor.  He sent Captain Cisne with 50 soldiers to cover the stone fence and to cover the weakest part of the patriot’s line of defense, the wooden corral on the side of the house; most of the men were Matagalpa Indians armed only with bow and arrows.  Captain Avilés, with another 50 soldiers, was to defend the southern corridor to the death.  Captain Sacasa and the last group of 50 men remained inside the thick walls of the adobe hacienda house.

 

Meanwhile, the American mercenaries had dismounted and approached the house on foot.  Aided by the thick fog, they slowly advanced toward the house. Colonel Estrada gave orders to refrain from shooting at long range, and wait until the last minute to charge at point blank range.  The ghostly fog and the early hour gave the whole place and eerie air.  It was 4:45am.  About 80 well-armed and military-trained soldiers of fortune were about to engage a 160 ill-armed peasant regiment with more heart than weapons, and more determination than bullets.

 

The Nicaraguan soldiers waited patiently for the American’s charge with orders to save as more ammunition as possible firing only at definite targets.  Cole ordered a three-pronged offensive around the house.  At 5am, his men placed in the order of attack, Lieutenant Colonel Byron Cole, William Walker’s second-in-command shouted “Charge!!!”, and the Americans opened fire all at once.  Cole himself attacked the right flank, the corral.  Major O’Neil charged the center toward the southern corridor of the house, and Captain Watkins took the left flank, that is, the stone fence.  The charge was unsuccessful as the Nicaraguans held their ground.  The exchange was fierce and bloody, but the Americans were unable to overrun the defenses.  The Americans brandished the brand new double-action Colt six-shooter, and the modern breech loading Sharps carbine.  The defenders were using 50 year-old front-loading muskets, and had no pistols.  The first wave of attack lasted only 10 minutes, until Cole ordered his men to fall back and regroup.

 

They charged again, but this time they all attacked the weakest point of the Nicaraguans, the corral.  The Americans charged shouting: “Hurray Walker”, but again were cut down by the concentrated fire of the patriots.  However, the Americans outnumbered the defenders, and soon the Nicaraguans began to retreat back to the house.  Capt. Sacasa was killed in the ensuing action, and as the mercenaries began to overrun the corral, the fight became a more intense, hand-to-hand combat with bayonets and machetes.  A Nicaraguan soldier, not having time to load his weapon, killed an American who was jumping over the entrenchment, hurling a rock to his face.  The soldier’s name was sergeant Andrés Castro, who forever became the epitome of courage and determination.  Cole saw Watkins receive a bullet in the forehead, and many more of his comrades fell victim of machete wounds.

 

Nevertheless, the Americans were relentlessly gaining ground, and soon the Nicaraguan’s retreat became a rout as Lieutenant Zaragoza and several soldiers abandoned their posts and ran. Col. Estrada, however, remained cool as he saw Lieutenant Eva with privates Solís, Velez, and Manuel Marenco holding their ground at the southernmost corner of the corral without any regard for their own lives.  Estrada then had a flash of an idea, and sent Capt. Cisne, Lieutenant Siero and Sergeant Fonseca to go around the house to the east and attack the Americans in the rear to divert their charge.  Off they went, and rounded the house unbeknownst to the mercenaries.  Suddenly, they fell on the Americans screaming wildly “Long live Martinez”, referring to Gral. Tomás Martínez, military leader of the Legitimist Army fighting Walker and his column.

 

At this point, Cole perceives that he cannot overrun the house. It is too well-defended.  Little does he know that fate is going to deal him a tough hand on this very day.  Just as he is preparing to rush the house once and for all, he hears shouting, shots and the rumble of hooves to the southeast.  “Fresh troops are attacking my rear”, he thought.  The confusion gives the defenders a boost of morale and, Cole watches in horror as his men start to run away in all directions.  He is unable to control and direct his troops, after all, he is just a lawyer.  He too runs away.  He never knew that the horses he heard were not fresh troops coming to aid the peasants, but a stampede of the Hacienda’s herd, that alarmed by the shouting and the shooting ran from the grazing fields toward the Hacienda’s corral.

 

The fight lasted only about 30 minutes.  Strewn in the field the Americans left scattered 35 men.  They carried many wounded as they fled back to Tipitapa.  The patriots chased the mercenaries through the woods.  They captured 18 Americans and killed them.  Some were hanged and some were cut to pieces by vindictive machetes. Byron Cole was captured by the scout Faustino Salmerón, who hanged him on the spot.  The patriots suffered around 55 casualties, their names forgotten by history.  But their courage would become a legend and their victory that day a turning point in a war for freedom and self-determination.
Carnita de monte: animales encuevados nicaraguenses
D. Arroliga.

A la llegada de los españoles, nuestros antepasados indígenas no tenían muchas fuentes de proteínas, más que los frijoles, peces de los lagos (las lagunas eran sagradas y no se tocaban), chompipes, venados, chanchos de monte (muy difíciles de cazar con arcos y flechas), y el famoso xoloitzcuintle, que era un perrito oriundo de America sin pelo y que no ladraba. Los animales grandes de tiro como el caballo y las vacas los trajeron los españoles, junto con los chanchos. Entonces, los indios comían carnita de monte: cusucos, guardatinajas, garrobos, iguanas, zorros colapelada, la guatusa y hasta culebras como la boa. En la foto un cusuco o pitero.
 
 
Guardatinajas, guatusas y garrobos
Estos tres animalitos están en vías de extinction debido a su caza indiscriminada en Nicaragua. La guatusa y la guardatinaja son roedores y todavía se encuentran mucho el la Costa Caribe. En las fotos, primero la gaurdatinaja con sus pintas blancas, luego la guatusa, con sus talones lisos y finalmente el guapísimo garrobo.
 

 
 
Aniceto Prieto: Sacristán del Galope
D. Arroliga.

Aniceto es un personaje creado y protagonizado por Otto de La Rocha para los cuentos de Pancho Madrigal y Lencho Catarrán. Aniceto vive en el pueblo ficticio del Galope en algún lugar de Nicaragua. Aniceto con su amigo entrañable, Carelara, hace diabluras y le pone serenatas a las muchachas del Galope, especialmente, su eternal enamorada la Lupita.

Un día, siendo Aniceto sacristán del pueblo, se enfermó el curita de faringitis y no podía dar la misa. Le pidió a Aniceto que lo asistiera en la homilía. Ese domingo tocaba predicar acerca del milagro de la resurrección de Lázaro. Aniceto empezó muy bien, a pesar que con su acento campesino empezó a exagerar la historia. De repente, para terminar, dijo: '...y el Séñor 'Socristo dio gran voz y dijo, Lázaro! Levántate y anda. Y Lázaro se levantó y andó...!' El curita que estaba detrás de Aniceto, le jaló el balandrán de sacristán que andaba Aniceto y lo corrigió gritándole al oído molesto: 'Anduvo, pendejo!' Entonces Aniceto, se aclaró la garganta y corrigió: 'Sí, anduvo pendejo, pero después se compuso!'

 
 
Managua de cumpleaños.
D. Arroliga.

Desapercibido por muchos fue el hecho que Managua cumplió 162 años de haber sido elevada a Capital de la República. Esto sucedió el 5 de febrero de 1852, en parte debido a la gran rivalidad entre Granada... y León quienes siempre se disputaban la hegemonía.

Cuando se celebró el primer centenario de este hecho en 1952, el compositor Justo Santos compuso 'La Mora Limpia' para un concurso en conmemoración del centernario. Desde entonces La Mora Limpia se ha transformado en el segundo himno nacional de Nicaragua.

Paradójicamente Justo Santos no era oriundo de Managua, había nacido en 1925 en un pequeño poblado de Rivas llamado Palos Negros situado en el camino que lleva a Tola y en cierto momento llegó a Managua en busca de nuevos horizontes. Formó parte del Trío Los Criollos con Carlos Adán Berríos, quien luego fundara el Trio Xolotlán. Justo también formó el Trío Los Pinoleros.

Los festejos para el Centenario de Managua como capital de la República, que se cumplirían en el año 1952, se prepararon con pompa y circunstancia y con la debida antelación. Desde el año 1946 la Presidencia de la República conformó un Comité que se encargaría de preparar la celebración y como parte de la misma, se convocó a un concurso para seleccionar una canción que reflejara el espíritu de la alegría que representaba los cien años de la capital. Justo Santos se entusiasmó e inscribió en dicho concurso una pieza que él había compuesto pensando en el corazón mismo de los capitalinos y que le había puesto por nombre La Mora Limpia, en honor de los preparativos que se realizan en el camino que recorre Santo Domingo en su bajada de las sierritas hacia la ciudad capital. Algunos relatores, con una imaginación más fértil, aseguran que la composición se refiere al árbol de la mora que aparentemente abundaba en dicho camino y que servía de refugio eventual al trío Los Pinoleros. La composición de Justo Santos no logró alcanzar el primer lugar en aquel concurso.

(información sobre Justo Santos tomado de Los Hijos de Septiembre)

Les dejo un video musical precioso de la Mora Limpia: http://www.youtube.com/watch?v=_uDCrS0je1A

 
 
 
"...y en un pozo de sombra la humanidad se encierra, con los rudos molosos del odio y de la guerra" R. Darío (Canto de Esperanza)
D. Arroliga.

Desde pequeño yo me preguntaba a qué se refería Darío cuando hablaba de 'molosos' en el Canto de... Esperanza. Resulta que el moloso es un tipo de perro gigante, como los mastines traídos por los españoles y utilizados para descuartizar indios. De los molosos devienes varias razas de perros de presa usados para peleas y antiguamente usados para la Guerra y en la Guerra.

Los perros de raza denominados molosos o gigantes han sido utilizados como guardianes y perros de pelea desde hace muchos años. Debido a su gran tamaño necesitan mucho espacio y grandes cantidades de comida al día.

Estos perros suelen necesitar practicar deporte a diario para gastar su gran energía. Si no hacen el suficiente ejercicio diario pueden ser demasiado rebeldes en casa e, incluso, pueden llegar a tener trastornos mentales por ello en casos más graves. Por eso digo que es muy importante que el perro salga a correr al menos una vez al día (teniendo que salir más a hacer sus necesidades, obviamente).

A continuación una lista de las razas de perros molosos más habituales y conocidas:
◾Bearded Collie. Esta raza está sufriendo un aumento de popularidad y aceptación como mascota en los hogares.
◾Mastiff. Esta raza es una de las más grandes que podemos encontrar en los molosos.
◾Mastín Napolitano. Esta raza se destaca principalmente como perro guardián y no tanto como compañía, aunque también es muy buena mascota.
◾Mastín Tibetano. Esta raza es de excelentes guardianes. El adulto color negro y fuego nos recuerda un poco al Rotweiller.
◾Mastín de los Pirineos. Con su hermosa capa blanca se mimetiza con la nieve de las montañas y no pasa frío gracias a su pelaje.
◾Dogo Alemán. Estos perros más conocido como Gran Danés impresionan por su monumental tamaño, siendo uno de estos el poseedor del récord Guiness.
◾Bulldog. Perros tranquilos y de buen carácter. Adaptables a cualquier familia pese a su cara de pocos amigos.
◾Dobermann. Por su mala fama como agresivo ha llevado a disminuir la aceptación de la raza, aunque si son bien educados no tienen problema.
◾Pinscher. Es una raza poco difundida, muy parecida al Doberman pero de tamaño mediano. Suelen confundirse con perros toys de cachorros.
◾Boxer. Esta raza es ideal como perro de familia pues le encantan los niños y disfruta mucho los juegos. Son muy nobles.
◾Bullmastiff. Animales de guardia, pues con su mera presencia impone respeto y hace desistir a cualquier intruso.
◾Bull Terrier. Llama la atención su peculiar aspecto. Es un estupendo guardián de ovejas y cazador de roedores.
◾Rotweiller. Estos son perros que hay que saber educar pues tienen un carácter un tanto complicado.

(tomado de Quanimal)